Aprende con nosotros

CUANDO EL MIEDO NOS PARALIZA O BLOQUEA

https://youtu.be/NhLCMluHXaY

Supongo que habréis escuchado alguna vez qué es eso de la "zona de confort" pero lo que no me imaginaba es que para salir de ella nos hemos de topar con un soldado fuerte, el miedo.

Os dejo aquí un enlace en el que lo explica estupendamente qué es esa zona. Yo llevaba años escuchando la palabra, había visto mil ilustraciones que hablaban de ello y he leído libros acerca de la zona de confort. En la mayoría, la gente cuenta sus historias y de cómo consiguieron cruzarla. Pero claro... una cosa es saber explicarle a alguien un concepto y otra muy distinta es vivir una experiencia en la propia piel. Yo siento en estos momentos que he cruzado la zona de confort, no sé si lo he hecho un poco o he dado un paso de gigante, pero siento que me he marchado de allí.

El miedo está presente cuando tomamos decisiones

Había escuchado decir "quien no arriesga, no gana". Pero, ¿ acaso arriesgar es fácil? A mí no me lo parece o, al menos, según las creencias de la sociedad y la cultura en la que vivo. Os quiero contar lo que me ha pasado:

Trabajaba de profesora y de periodista y desarrollaba paralelamente un proyecto, Maminat. La gente me preguntaba hasta hace unos meses cuándo hacía las cremas y les contestaba que después de cenar porque el resto del día lo había pasado en el trabajo. En el fondo de mi corazón sentía que eso no era vida, que vivía para trabajar y que, quizás, algún día las cosas cambiarían. Mi pareja me decía: "siempre dices lo mismo...". La familia me aconsejaba que debía bajar el ritmo y, lo mejor de todo, es que yo lo sabía pero no hacía nada al respecto.

¿Por qué me mantenía en dicha "zona de confort"? Por miedo. Y os lo voy a decir muy claro: el miedo tiene una cara buena y una mala. La buena es que nos permite estar en alerta, nos da la oportunidad de plantearnos y de sentir si lo que queremos hacer va acorde con nosotros pero, por desgracia, el miedo tiene una cara mala, malísima: la de paralizarnos y bloquearnos.

Cómo me ha bloqueado el miedo

Durante los últimos meses, me planteé salir de la "zona de confort" y dejar mi trabajo estable para adentrarme de lleno en el mundo del emprendedor; es decir, pasar de la estabilidad a la incertidumbre, del sueldo al fin de mes a no saber qué pasará... Y la historia preciosa de "voy a ser una emprendedora" me fascinaba pero dentro de mí corrían nervios, miedo, creencias limitantes, voces de los menos "aventureros" y una falta de conexión conmigo misma tremenda. Creo que durante unas semanas le puse a más de uno "la cabeza como un bombo" de tanto preguntarles: ¿ qué hago?, ¿ voy a poder?, ¿ crees que puedo conseguirlo?

En definitiva, no estaba siendo la dueña de mi vida y no lo hacía por miedo. Claro que también os digo que es muy bonito decirlo ahora...

Qué hice

Lo que hice fue escuchar mi corazón y mi alma que siempre tiene la respuesta. Nuestra sociedad nos ha enseñado a disgregar mente y corazón y en esas semanas de incertidumbre yo no conseguía alinearme. De hecho, intentaba meditar y me resultaba imposible. Al menos, era consciente de lo que me ocurría, tenía un montón de miedo.

Pero, al final lo he hecho y estoy feliz. He abandonado la estabilidad y me he adentrado después de años en mi ilusión, desarrollar Maminat durante todo el día. Ahora las cremas las puedo preparar por las mañanas, puedo escribiros este post al mediodía y estoy en paz. Sigo teniendo ciertos nervios por lo desconocido pero sé que estoy en el camino, en el camino del crecimiento y que la vida está para tomarla.

Solo puedo decir que lo primero es hacernos conscientes de qué nos está ocurriendo en cada proceso vital. Después del "darse cuenta", solo puedo decir que lo que me sirvió fue escuchar el corazón y que no ha sido tarea fácil. Aunque creas que no habla, el corazón nos habla todos los días.

Una postdata

Aprovecho este post para dar mi enhorabuena a todos aquellos que son capaces de hacer el ejercicio de tomar decisiones de forma decidida y segura. De alguna forma, quiero parecerme a vosotros y soy una gran inspiración para mí.

Lo que hacemos en Maminat es salud y belleza combinados y, durante esas semanas de miedo, perdí salud por todos los poros de mi piel.

Descubre en qué tiendas físicas estamos

Quiero verlas