La cosmética natural te proporciona múltiples beneficios. Si estás algo informado sobre ella, ya conocerás muchos de sus aspectos más beneficiosos (desde la sostenibilidad hasta el cuidado de la piel). Sin embargo, no suelen tenerse en cuenta sus ventajas contra el cáncer.
Partimos recordando que la piel es el órgano más grande del cuerpo. Se ve necesariamente afectada por cualquier cambio o modificación que acontezca en el cuerpo. Evidentemente, sufrir un padecimiento como el cáncer afecta enormemente a la dermis, provocando una serie de consecuencias de las que se habla muy poco.
A lo largo de este artículo, vamos a mostrarte de qué manera se ha de cuidar la piel cuando se padece esta patología.
¿Cómo pueden afectar a la piel los tratamientos contra el cáncer?
- El cáncer afecta a la piel de maneras muy distintas según cada persona. Sin embargo, cada terapia aplicada provoca diferentes reacciones en la piel. Las más habituales son las siguientes:
- La radioterapia descama, seca, enrojece y oscurece la piel, o incluso causa picazón y molestias. La radiación provoca un efecto similar a cuando se sufre una quemadura solar. A veces, incluso aparecen llagas húmedas, dolorosas e infecciosas (la llamada "reacción húmeda").
- La quimioterapia puede enrojecer, oscurecer, secar o descamar la piel, así como causar picores y molestias. En ocasiones, incluso se generan erupciones fotosensibles (es decir, que reaccionan a la luz del sol) o cambios en la pigmentación de la dermis.
- Los trasplantes de células madre pueden causar la enfermedad de injerto contra huésped (EICH), que produce problemas en la piel como ampollas, erupciones o engrosamiento.
- La inmunoterapia causa erupciones de gravedad que, en ciertos casos, llegan a ser extensas y dan lugar a una piel seca y ampollas.
- La terapia dirigida también produce una piel reseca, problemas en las uñas y erupciones.
¿Cómo cuidar la piel durante el tratamiento contra el cáncer?
Ya conoces de qué múltiples maneras el cáncer y sus tratamientos afectan a la piel. Veamos ahora las diferentes maneras de cuidar la dermis para reducir los comentados efectos negativos. Para ello, destacamos las siguientes acciones:
- Hidratación. Esta es, quizá, la clave para mantener la piel sana. Ten en cuenta que el agua permite tener una dermis flexible, extensible y permeable. Beber agua es esencial, pero también utilizar cremas y cosméticos naturales destinados a aumentar la hidratación de la dermis.
- Protección solar. Los rayos solares no dejan de ser una agresión para la piel. Por este motivo, protegerse convenientemente de los rayos UVA resulta fundamental para evitar que el estado de la dermis empeore.
- Eliminar la pigmentación. Tal y como hemos visto, diversos tratamientos contra el cáncer pueden dar lugar a diferentes grados de pigmentación en la piel. Pueden aparecer manchas en la superficie de la dermis, especialmente en las ingles, axilas, zonas laterales del cuello, cara y otros pliegues. En este caso, el uso de un despigmentante natural será de gran ayuda.
- Mejora estética. Utilizar maquillaje u otros cosméticos con una finalidad puramente estética o de belleza es siempre recomendable. Al fin y al cabo, esto nos permite aumentar la confianza en nosotros mismos y da pie a afrontar con un mayor ánimo la enfermedad.
- Dar cuidados a zonas especiales como las uñas, cejas, pestañas y párpados. Estas zonas pueden ser consideradas como puntos críticos, pues requieren un cuidado particular a través del uso de cosméticos de origen natural destinados a ellas.
El papel de la cosmética natural
El cuerpo que sufre cáncer padece múltiples cambios, especialmente en órganos clave como la dermis. Ahora bien, podemos hacer todo lo posible para que nuestra piel se encuentre en el mejor estado posible, incluso cuando es sometida a tales cambios.
Para todos los casos es aplicable la cosmética natural. Por encima de todos los demás productos cosméticos, los naturales son extraordinariamente recomendables. ¿Quieres saber por qué?
- Cuentan con ingredientes naturales beneficiosos para la piel.
- No tienen ningún químico ni reactivo artificial con los que la dermis pueda reaccionar negativamente y agravar los problemas preexistentes.
- Son extremadamente respetuosos con la piel y los equilibrios naturales del cuerpo.
- Ofrecen efectos saludables reconocidos científicamente mediante estudios
- Una gran parte de los cosméticos naturales, como los de Maminat, están específicamente diseñados para actuar sobre las pieles sensibles y dañadas por agentes externos o internos
En conclusión, frente a los problemas que el cáncer ocasiona en la superficie de la piel, no hay nada mejor que hacer uso de las enormes ventajas de la cosmética natural.
Concretamente, los productos que ofrecemos desde Maminat están específicamente pensados para actuar sobre dermis sensibles, dañadas y que necesitan una pronta recuperación.
Estos productos respetan el medioambiente y no incorporan ingredientes artificiales. Y más allá de esto, nuestros cosméticos garantizan un combate rápido contra los daños dermatológicos derivados del cáncer. Si quieres sentir cómo actúan nuestros productos, no dudes en adquirirlos hoy mismo. Consulta el catálogo online de Maminat.