24 enero, 2019
Piel seca en invierno, ¡cada año lo mismo!
Seguro que ya has notado que el invierno está siendo muy frío, ¿verdad? Y que sin calefacción no puedes vivir. Si es así, habrás notado que tu piel ha cambiado. La notas más apagada, más tirante, más sensible y, sobre todo, sientes la piel seca. Entonces... ¿POR QUÉ TENGO LA PIEL SECA EN INVIERNO? El frío y el viento, hacen daño a tu piel, pero también tenemos un enemigo más…¡¡¡la calefacción!!! Estos tres factores hacen que la hidratación que tenemos en nuestra epidermis vaya poco a poco desapareciendo y dando lugar a la sequedad, las rojeces, las grietas y las irritaciones en nuestra piel. Pero, si además tienes la piel sensible, tu dermis sufrirá más debido a los cambios bruscos de temperatura.
¿ENTONCES, QUÉ PUEDO HACER PARA EVITAR LA PIEL SECA? Si todavía estás a tiempo de esquivar que tu piel sufra, como si ya has llegado demasiado tarde y la sequedad ha aparecido en tu piel, necesitas planificarte una rutina diaria para prevenir los daños por las bajas temperaturas en tu cutis: 1.REGULA LA TEMPERATURA POCO A POCO. Si del frío de la calle, entras en casa y pones la calefacción al máximo, tus capilares sufrirán mucho y podrán dilatarse. Controla la temperatura, si es posible, para evitar que la piel sufra.

- SUSTITUYE LA PALABRA CALIENTE DE TU DICCIONARIO POR TEMPLADA. Aunque sea lo que más apetezca en estos días fríos, el agua caliente es uno de tus peores enemigos. Ducharse o lavarse con agua caliente hará que los aceites buenos que tienes en la piel desaparezcan. Por ese motivo, utiliza el agua tibia para conservar los lípidos naturales y mantener la suavidad en tu piel.

- TRANQUILOS, MAMINAT TE AYUDARÁ. Es muy importante utilizar cremas en cualquier época del año, pero es en invierno cuando tenemos que prestar especial atención a aplicarlas diariamente. Para mantener el envoltorio protector que protege toda nuestra piel, en Maminat está todo lo que necesitas para tener una rutina de belleza y de salud en la que la hidratación sea la protagonista.
